El consumidor se enfrenta a dificultades para acceder a la financiación y a la falta de ahorros en buena parte de los hogares españoles. Por ello tenemos que ser  capaces de producir obra nueva a precios asequibles, y para ello no solo está el problema de escasez de suelo, sino la falta de voluntad política de promover más vivienda protegida. Estas viviendas son un estabilizador social del acceso a la vivienda. Así como reducir los plazos de obtención de licencia de obra, en ciudades como Madrid se está tardando hasta 13 meses para obtenerlas, esto encarece el producto final.